martes, 8 de septiembre de 2009

Una lucha que valió la pena

Después de tanta espera por fin el IPEM 347 abrió las puertas de nuevo edificio. Luego de unos días de haber comenzado las clases, la directora del establecimiento recibió una llamada del gobierno provincial para realizar la entrega del mismo. Todavía no se ha inaugurado oficialmente y está la posibilidad por mayoría de que se llame San José de Calasan.



El IPEM 347 funcionó desde sus comienzos en la escuela Rafael Obligado, compartiendo sus actividades con las de la escuela primaria. Los reclamos por el nuevo edificio comenzaron el año pasado, y supuestamente iba a ser terminado para mediados de 2008. Desde principios de este año se viene reclamando por su terminación porque la obra había sido abandonada faltando solo un 5%. Las causas de la demora no se aclararon todavía, pueden ser problemas políticos, falta de presupuesto, entre otras, lo importante es que se terminó y los alumnos pueden continuar con sus estudios.


Volver para entender
“Frente a todos los reclamos que se realizaron donde hubo el apoyo del pueblo, de los alumnos, del personal docente, finalmente se considero que la defensoría del pueblo también tomara parte, indudablemente toda esta presión logro que la escuela se terminara no en los tiempos establecidos pero finalmente se termino. Al final de las vacaciones de invierno se pudo iniciar el dictado de clases dentro del establecimiento”, así lo expresó Alejandro Sosa, ex presidente de la cooperadora.
El señor Peretta, de infraestructura de la provincia, había dado un mes de plazo para la entrega del colegio. Una vez terminado el edificio, le colocaron una plaqueta con la inscripción equivocada de IPEM 299, por esto Aida Ladoux, directora del colegio, se comunicó con el gobierno provincial. Luego del reclamo, Aida recibe un llamado de la provincia. “Me llaman si me podía presentar en Córdoba, en la Unidad coordinadora en la Casa de Gobierno. Me iban a hacer entrega del edificio, así que viajamos con urgencia. Estaba la empresa Alarcón y el señor Pereta, tuvimos una reunión y ahí el dijo que el compromiso que él había hecho con los papás y con la comunidad de Embalse era de entregar la escuela terminada. Y que habían solucionado el problema de la luz y el agua”, comentó Aida.
Hoy el colegio esta todo terminado, lo que está faltando es el servicio de luz y agua completo, porque tienen el de servicio básico que había quedado de la etapa de construcción.
Un orgullo de todos
La directora valora y analiza mucho el esfuerzo de varias personas que influyeron para que se llegue a tener el nuevo edificio. “Me siento demasiada orgullosa, porque en los años que estamos ahí haber conseguido tanto de lo que hemos conseguido. Yo cuando entre esta escuela no tenía nada, se manejaban con el celular de una mama, gente que colaboro con esta escuela pero no teníamos nada. Y ahora tenemos tantas cosas, que vos decís en 7 años tenemos este monstruo. Yo creo que lo que se ha luchado se ha conseguido”, afirmó Aida.
La institución cuenta con dos carreras, maestro mayor de obras y agronomía, ambas duran 7 años. A partir ahora la cantidad de alumnos subió y se espera que el año que viene alcance los 700 alumnos. Los alumnos tienen turnos de las 7,30 de la mañana hasta las 18 horas.
Inauguración oficial
“Hoy el establecimiento está esperando a que se den algunas condiciones para ser inaugurado oficialmente. Lo que si se comenzó el dictado de clases porque era necesario el espacio físico para poder dar bien las asignaturas”, dijo Alejandro Sosa.
La directora expresó: “Mas adelante se irá a inaugurar. La obra tiene un año de garantía y están viniendo a controlar ellos para ver cómo va todo. Por eso no se ha hecho supongo la inauguración formal donde tendría que venir la presidenta porque son de las 700 escuelas de Nación más el gobernador”.
Para darle la bienvenida a los alumnos se hizo un pequeño acto. “En el zoom, el salón de usos múltiples, se hizo una recepción de bienvenida a los alumnos después de las vacaciones y se invito al sacerdote Sergio Fernández y nos acompaño el intendente Federico Alesandri”.
Año de cambios
En poco tiempo los alumnos vivieron muchos cambios, el más grande fue el cambio de edificio. Así lo confirma la directora: “Cambio todo. La comodidad de los chicos, que se sienten tranquilos”. El colegio posee salas de música, de informática. Tienen huertas, el invernadero, talleres y el laboratorio. “Todo el mundo trabaja y entra contento”, dijo Aida.
Otra de las cosas que cambiaron fue el nombre. En la placa por equivocación quedó como IPEM 299. Ahora están en proceso de decisión del futuro nombre, se han propuesto 8 nombres. “Estaba San José de Calasan primero y Cesar Milstein segundo, porque hay que hacer toda una votación dentro de la escuela con los profesores. Ya lo enviamos a Córdoba para que ellos aprueben y nos dejen ponerle el nombre”, dijo Aida.
El problema que tienen ahora es la falta de personal contratado, ya han pedido que el Gobierno provincial les mande gente. “El personal el único es la secretaria, 3 profesores y ahí nomas. No hay bibliotecario, faltan preceptores, falta prosecretario y un ayudante de secretaria. Entre todos la estamos piloteando”, expresó Aida.

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