El milagro de la api toxina

El milagro que la ciencia no quiere reconocer, la terapia llevada a cabo con la api toxina; según las palabras del fisioterapeuta Rodolfo Orce: “el veneno de las abejas se difunde muy poco y tiene curas milagrosas”

El médico ruso Orlov trató en 1969 en el congreso de Bucarest sobre el veneno de las abejas y su incidencia sobre el sistema nervioso central. Según rezan algunas leyendas muchos casos de peste y cólera fueron curados con picaduras de abeja. Lo que es cierto, es que en la actualidad se ha comprobado su eficacia en casos de bronquitis, bocio exoftálmico y oftalmía. El veneno de las abejas tiene propiedades revulsivas más rápidas que la harina de mostaza, debida a que es tónico cardíaco, fluidificante de la sangre y vasodilatadora (dilata las arterias).Es muy eficaz contra los reumatismos, la ciática, gota, artritis, neuritis, neuralgias, poliartritis crónica evolutiva y paludismo. El veneno de la abeja es un tónico general, aumentando el dinamismo del sujeto que se somete a sus picaduras de forma controlada y voluntaria.

Rodolfo José Orce fisioterapeuta de Villa General Belgrano, ejerce su profesión desde hace 33 años, descubre y realiza cesiones de apito terapia desde hace 6 años.
Existen investigaciones muy serias en Francia, España, Rusia, Suiza de hace muchos años, es un tratamiento milenario y efectivo “casi milagroso” para enfermedades especialmente que están relacionadas con el sistema inmunitario de nuestro cuerpo, defisis de autoinmunidad como psoriasis, artritis reumatoide, variedades de reumatismo, esclerosis, osteoartritis, inflamación nerviosa, lumbalgias, discopatias, hombro congelado, tendinitis, tortícolis; se ven beneficiadas por este tratamiento.

¿Cómo funciona?
“El pinchazo de la abeja, es la única manera efectiva que se conoce para controlar, la cantidad justa de veneno y evitar que las poderosas enzimas se descompongan por efecto del oxigeno, calor o luz. Se toma la abeja por el tórax y dirige el aguijón hacia el punto previamente seleccionado e insensibilizado con suave presión sobre la piel para que se clave, se retira luego rápidamente la abeja que deja su glándula del veneno, se saca el aguijón cuidando de no tocar la glándula”, dijo el fisioterapeuta.
Agregó: “Hay tratamientos largos y tratamientos cortos muy efectivos dependiendo de la enfermedad del paciente. Las personas que están ante la alternativa de manos rígidas, en el caso de una artritis reumatoide, la medicina tradicional esta tan limitada que actúa a través de las corticoides que alivian por un lado, pero que tiene tanta contradicción por otro, el tema de despertar el propio organismo se defienda y reaccione a través del estimulo de la apitoxina, este veneno sabemos que mata o cura. Pero este veneno estimula nuestro sistema inmunitario y hace que sea tremendamente beneficioso, en cuestión de horas el paciente siente alivio”.

¿Por qué no se difunde?
“No se difunde mucho porque no es negocio, porque es una cosa que lo puede hacer el paciente una vez que lo sabe como capturar la abejita, donde colocarla y como usarla, esta a nivel de todos pero hay que difundirlo, porque es algo milenario, esta fuera de toda discusión, hay que usarlo con precaución, a veces una abejita puede matar según la sensibilidad del paciente. Pero lo positivo es que la población en general, el 10% puede ser alérgico al veneno de las abejas, por eso el terapeuta siempre le hace una prueba para ver si el paciente es viable o no para este tipo de terapia, una vez comprobado que no tiene reacciones alérgicas, y bueno, esta bendecido por el Señor”. Agrego, “a pesar que es poco difundido existe una sociedad Argentina de apito terapeutas que están trabajando con seriedad”.

Hablando de costos
Orce dijo: “Justamente esto que me llega por esas cosas de Dios, lo tomo como que le enseño al paciente crónico a seguir aplicando las abejitas según la evolución, dolor que presenten en el caso de reuma o psoriasis, que se lleguen aplicar a veces hasta 25 abejas en forma progresiva y regularmente, pero es algo que el paciente una vez que ya sabe como manejarlo lo puede hacer tranquilamente a través del tiempo y de los años en beneficio propio y de las condiciones que pueda difundir porque el alivio que se siente es bárbaro debido a este tratamiento”.